7 trucos para superar tu nerviosismo

El nerviosismo puede aparecer en situaciones más cotidianas, como conocer gente nueva, entrevistas de trabajo, una primera cita o una reunión importante.

Cuando los nervios golpean, sientes como si no estuvieras a la altura del desafío al que te enfrentas y, si los dejas, te harán dar la vuelta, huir y esconderte debajo de las sábanas.

A veces basta con un buen té de therbal para controlar los nervios pero en otras ocasiones no siempre tendrás esta bebida caliente para calmarte, por ello, aquí hay 7 formas de superar el nerviosismo. 

1. Céntrate en lo mejor

¿Cómo eres cuando estás en tu mejor momento? Piensa por un momento en los tiempos en que has estado en la cima de tu juego, fluyendo y sintiéndote vivo, luego sumérgete, nada y saborea cómo se siente.

Estar en tu mejor momento se trata de dos cosas: llevar todo lo que eres al momento en que te encuentras y la ausencia de todos los molestos miedos, dudas y nervios que te hacen tropezar.

Es genial y cuando te familiarizas realmente con cómo se siente, puedes sacarlo en cualquier momento. Todo lo que se necesitas es un pensamiento consciente y deliberado de tu parte para ir allí.

2. Sigue tu aliento

Le nerviosismo o nervios son pensamientos perniciosos y pegajosos que giran en espiral en ese maravilloso cerebro tuyo.

Tu respiración es una de las herramientas más poderosas para volver a la normalidad, por lo que la próxima vez que los nervios golpeen, cambia suavemente tu enfoque hacia tu respiración a medida que entra y sale de tu cuerpo.

No hagas nada con la respiración, no la fuerces ni trates de regularla, solo observa la duración completa de la respiración, donde sea que la sientas en tu cuerpo.

Mantén tu atención en la respiración, notando las sensaciones en tu cuerpo mientras exhalas, e incluso la pausa momentánea entre la inhalación y la exhalación.

3. Restablece tus expectativas

Tu cerebro ama la certeza y, en un esfuerzo por tratar de estar más seguro acerca de cómo resultarán las cosas, creará una serie de resultados esperados.

Estas expectativas abarcarán toda la gama entre el éxito maravilloso y el fracaso trágico, pero, dado que son las expectativas más dolorosas y negativas las que amenazan tu seguridad, son aquellas a las que tu cerebro presta más atención.

Pero no son reales. No son más reales que la cabeza de Darth Vader sentada en el escritorio de tu oficina. Una vez que te das cuenta de que no necesitas bailar con esta melodía negativa en tu cabeza, barrer tus expectativas se siente notablemente liberador.

4. Tranquilízate y supera el nerviosismo

Los nervios o nerviosismo son realmente historias sobre todas las cosas que podrían salir mal; como arruinarlo todo, parecer un tonto o que la gente piense menos de ti. A medida que avanzan las historias, no tienen finales muy felices, pero al final, siguen siendo solo historias.

Esas historias no tienen que desarrollarse, así que tómate un momento para tranquilizarte. Has llegado hasta aquí y todavía estás bien. Has enfrentado desafíos antes y has salido bien. Esto también estará bien. Estarás bien, pase lo que pase, lo superarás y vivirás otro día. ¡No te estreses!

5. Normalizar el rechazo

Rechazo seguro se siente desagradable ¿no? A medida que avanzan las experiencias, es bastante horrible, pero eso es solo porque estamos conectados a pensar que es “malo”.

La verdad es que nadie pasa por la vida sin que el rechazo aparezca en alguna medida, y una vida que se pasa evitando el rechazo es una vida que no se ha vivido.

El miedo al rechazo aumentará la presión y pondrá los nervios de punta, pero ¿y si el rechazo no fuera tan malo? ¿Qué pasa si no significaba que eras menos o no lo suficientemente bueno, sino que simplemente significaba que no funcionó esta vez?

6. Elige qué pensamientos honras

¿Qué escuchas en tu cabeza cuando te golpea el nerviosismo? No puedo hacer esto, Esto es horrible, No soy lo suficientemente bueno, ¿Qué pasa si lo arruino?, etc.

Familiar, ¿verdad? Si hay algo en lo que tu cerebro es bueno, es hacer pensamientos. Lo hace todo el día, tanto si los quieres como si no.

Un pensamiento sobre lo que cenaste anoche, un pensamiento sobre la habitación en la que estás a punto de entrar nerviosamente, un pensamiento sobre esa cosa graciosa que dijo tu amigo, un pensamiento sobre cómo te sentirías si te equivocas.

Todos son solo pensamientos, y el pensamiento que los supera a todos es el que decide en quién confías y honras. ¿Cuáles vas a escuchar?

7. Practica más para la próxima vez

Es cierto que cuanto más haces algo, mejor te vuelves. Ya sea para cocinar el pedazo de pescado perfecto, correr o tocar la guitarra, siempre comienzas desde cero, le das una oportunidad, practicas un poco más y te mejores.

Tus habilidades y capacidades evolucionan continuamente y cuanto más practiques, más te acostumbrarás y más efectivo te volverás.

Entonces, cuando comiences con algo que te pone eleva el nerviosismo en tu ser, prepárate para la incomodidad inicial y esos nervios novatos, luego busca oportunidades para practicar, aprender y crecer.

Tómate tus flores de bach y toma el toro por los cuernos, que el nerviosismo no frene ninguna de tus actividades en tu día a día.