¿Cómo afecta la contaminación a nuestra salud?

Repasamos los elementos contaminantes presentes en el aire, de dónde vienen y cómo nos afectan.

El tema de la contaminación del aire es relativamente novedoso en cuanto a su estudio se refiere, pues no fue hasta finales de los 70 y la década siguiente hasta que se comenzó a tomar el problema de la calidad del aire como un asunto serio que abordar a la hora de cuidar la salud de los ciudadanos, en particular la de sus pulmones.

Durante esta época, la mayoría de los expertos catalogaban la contaminación atmosférica de casi todas las ciudades del mundo como poco peligrosa para la salud.

Hoy casi 40 años después, las principales agencias tanto gubernamentales como no gubernamentales. Reconocen que la inhalación de contaminantes, especialmente aquellas partículas más finas, representan un riesgo muy elevado de muerte prematura.

Derivado de esto se comenzó a realizar análisis a nivel global por parte de la OMS y la EPA para estudiar tanto la calidad del aire, como la contaminación y los posibles riesgos para la salud.

Fruto de estos estudios a nivel mundial sobre calidad de aire y contaminación se llegaron a dos importantes resultados. En cuanto a materia de salud se refiere, obviamente en cuanto a medioambiente y otras áreas, el foco de atención se había puesto con anterioridad y tomado medidas como el protocolo de Kioto.

Los principales contaminantes del aire producidos por la actividad humana son:

Óxidos de azufre (SOx)

Particularmente, el dióxido de azufre es un compuesto químico cuya fórmula es SO2. El SO2 se produce en las erupciones volcánicas y en diversos procesos químicos industriales. Dado que el carbón y el petróleo a menudo contienen compuestos de azufre, utilizarlos como fuente de energía genera dióxido de azufre.

Además la oxidación de SO2, por lo general en presencia de un catalizador como el NO2, forma H2SO4, y, por tanto, lluvia ácida. Esta es una de las causas principales que generan tanta preocupación por el uso de combustibles fósiles en la salud. Aparte del efecto invernadero a nivel medioambiental.

Monóxido de Carbono

El monóxido de carbono es incoloro, inodoro, no irritante, a diferencia de los oxidos de nitrógeno, pero muy venenoso. Es un producto de la combustión incompleta de combustibles como el gas natural, carbón o la madera. Los vehículos a motor son una de las principales fuentes de monóxido de carbono.

Dióxido de carbono

El dióxido de carbono (CO2), es un gas de efecto invernadero emitido por la combustión, también presente en el aire.

Compuestos orgánicos volátiles (COV)

Diversos compuestos orgánicos volátiles (COV) son un importante contaminante del aire en el exterior.

Hidrocarburos: Otro de los compuestos orgánicos volátiles son también gases responsables del efecto invernadero a través de su papel en la creación de ozono y en la prolongación de la vida del metano en la atmósfera. Aunque el efecto varía en función de la calidad del aire local, también puede dañar nuestros pulmones.

Partículas en suspensión

Son pequeñas partículas de sólidos o líquidos en suspensión. Algunas partículas se dan de manera natural, procedentes de los volcanes, las tormentas de polvo, los bosques y los incendios de pastizales.

Las actividades humanas, tales como la quema de combustibles fósiles en vehículos, centrales eléctricas y diversos procesos industriales también generan importantes cantidades de aerosoles.

Un aumento de los niveles de partículas finas en el aire está vinculado a peligros para la salud tales como enfermedades del corazón. Alteración de la función pulmonar y el cáncer de pulmón. Además debemos cuidar nuestras vías respiratorias con los medicamentos adecuados como Cefixima.

Metales Pesados

Son metales el plomo, cadmio y cobre, y también los Clorofluorocarbonos (CFC). Estos son nocivos para la capa de ozono y emitidos a partir de los productos refrigerantes o neveras, actualmente de uso prohibido en los países industrializados, pero no en los países en vías de desarrollo.